Hoy en día dado el agotamiento y manejo insostenible de los recursos naturales, se está potenciando el desarrollo de soluciones de eficiencia y ahorro energético, como alternativas válidas de valor energético y preservación del medioambiente. Con estas premisas ha nacido Biocool, la bioclimatización de por última generación, que con ingeniería europea, enfría grandes espacios de forma económica y ecológica.
Su funcionamiento es sencillo. El aire caliente del exterior se humedece al pasar por unos filtros empapados en agua, refrescando el aire que ya filtrado se impulsa al interior con hasta 12ºC menos de temperatura. Se trata del mismo principio de brisa natural que se obtiene junto a la orilla del mar. Todo un avance sostenible y ecológico.
La bioclimatización cuenta varias ventajas frente a los sistemas tradicionales de climatización. En primer lugar, sobresale por su reducido consumo energético. Desde un punto de vista cuantitativo, se considera que el consumo puede llegar a ser hasta un 80% inferior al de un equipo de aire acondicionado. Encima, destaca por su reducido coste tanto de instalación como de mantenimiento.
Por otro lado, su eficiencia energética es apta para el enfriamiento de grandes espacios como naves industriales, donde se puede focalizar la zona a enfriar sin pérdida de efectividad ni de energía. Generalmente, en estos casos la opción tradicional consiste en la extracción del aire caliente de las zonas altas, de manera el aire que se introduce en el interior de la nave continúa estando caliente y sin filtrar, por lo cual el resultado no es eficaz. Además, hay que tener en cuenta que en ocasiones solamente se trabaja en una parte del recinto, por lo que no hay que tratar todo el volumen, y Biocool puede impulsar aire fresco sólo donde se precise, ahorrando gran parte del coste sin pérdida de efectividad alguna.
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